Volví de mi #pausa. Y en estos días de desconexión y descanso, justamente leí el libro "Pausa" de #RobertPoynton. Y me encantó.

Él explica que tomarnos pausas cada tanto, nos permite cambiar el ritmo de vida y darnos cuenta de lo que sucede adentro (que con el "bochinche" cotidiano se hace difícil). Ahí, nuestra percepción de lo que es importante cambia (yo lo aseguro).

También comenta que en las pausas se dan momentos de reajustes, de regeneración, de nuevas ideas y perspectivas. Es un tiempo crucial que le da forma a todo el año (y espacio a las ideas para respirar). Es "tiempo no dirigido", que nos cuesta mucho regalarnos. Porque nos causa ansiedad "el vacío" "la nada", o porque "el estar siempre ocupados está bien visto". Pero ojo, porque "el no perder nunca el tiempo, tiene un precio".

Dice Poynton que el tipo de trabajo que hacemos y la naturaleza de problemas a los que nos enfrentamos requieren de más pausas, no de menos. Que hay que ser capaces de parar. La pausa es importante para la creatividad, la comunicación, y las relaciones sociales. También para el propio bienestar y salud mental. Que pausar hace posible otra forma de pensar. Y que cómo pausamos, revela algo de quiénes somos.

Que tomar aire nos cambia física y mentalmente, rompe el círculo vicioso de la prisa y el pánico. Que debemos combatir la sensación de que nuestra vida está gobernada por un ritmo externo y mecánico, marcado por otra persona (o aparato), y movernos a un ritmo más propio. Que estar constantemente pendientes de qué será lo siguiente, genera ansiedad, estrés y presión.
Y que como dijo el ex futbolista Zinedine Zidane,  "a veces la magia y la nada están muy próximas" 🌈

¡Hola de nuevo! 🖐 Me hizo muy bien esta pausa. ¿Qué idea del libro les resuena más? ♥️