Lo llevamos al baño. Es lo primero que agarramos al levantarnos. Lo miramos de reojo mientras comemos, jugamos con nuestros hijos, o hablamos con una amiga. A veces lo desbloqueamos sin saber para qué. Nos encanta. Nos estresa. Nos “obliga” a contestar todo aquí y ahora. Nos pierde del #AquíYAhora. Nos multi-distrae. Nos conecta. Y desconecta. Nos angustia si lo tenemos lejos. Y qué alivio también, olvidarlo por ahí. Lo chequeamos tan seguido, que a veces nada cambia desde la última vez que lo vimos. O sí. Y pensamos qué –tan- locos estamos todos. Porque como bien escuché por ahí: “Vivimos entre pantallas táctiles que nos hacen perder el tacto con el mundo”. Fuerte.

Cuando leí que en la campaña “Phone Life Balance” de Motorola preguntaban “¿Tu teléfono te pertenece o le pertenecés a tu teléfono?”, me quedé pensando. A veces es difícil saberlo. En mi caso, porque también trabajo con el celular. Pero reconozco que decir eso, no es más que una excusa. Soy de las que creen que estos aparatitos llegaron para solucionarnos gran parte de la existencia, pero también para invadirla a montones. ¿Y entonces? La idea es encontrar el equilibrio entre cómo usamos nuestros dispositivos y cómo disfrutamos la vida.

Fijensé que a partir de esta campaña, se desprenden datos como que en Argentina, el 19 por ciento de los usuarios dice que chequeó su Smartphone durante un casamiento; el 54 por ciento, que revisa siempre el celular antes de levantarse, y el 65 por ciento, que cuando va al baño lleva su teléfono*. Y la lista sigue, así que si quieren seguir conociendo datos, pueden ver los resultados completos acá: https://phonelifebalance.hellocities.com.ar/

Como dicen desde la marca, la clave está en  llegar a ser un “Phone-consciente”: usar la tecnología para ahorrar tiempo y energía, que después podamos invertir en cosas que nos importan. Comprender el valor de las relaciones y cómo aprovecharlas. Tener horarios para el Smartphone y para vivir el momento. Y sobre todo, poder ver que el equilibrio entre el celular y nuestra vida es algo que necesitamos cuidar. Y trabajar para mantenerlo. La invitación desde Motorola es a que nos preguntemos: ¿Nos podemos resistir a revisar notificaciones y contestar mensajes cuando estamos con familiares o amigos? ¿Podemos estar presentes cuando estamos conectados? ¿Podemos compartir igual en la vida real como lo hacemos en Internet? Es momento encontrar el balance. Y que los teléfonos nos ayuden en el día a día sin convertirse en el centro de atención.

Les dejo un link, con toda la info del #PhoneLifeBalance Argentina, y varias notas muy piolas: https://hellocities.com.ar/motoexperiences/ Y también este video para que piensen qué tan conectados (o desconectados) están: https://hellomoto.pe/phone-life-balance.

                      Levantemos la mirada, que ahí está la conexión más importante.

*El test Motorola Phone-Life Balance se llevó a cabo online entre el 21 de Marzo al 31 de Julio de 2018.